La mampostería y la albañilería comenzaron hace unos diez mil años, justo cuando las primeras civilizaciones humanas comenzaron a cultivar y, posteriormente, se volvieron menos nómadas. La mampostería se impuso como un medio para construir estructuras más permanentes. ¡Los restos de algunas de estas primeras estructuras aún sobreviven hasta el día de hoy! El proceso de mezclar arena, arcilla y otros materiales de origen local dio lugar a una artesanía que sigue siendo una gran parte de la construcción moderna. Aunque los materiales y métodos han evolucionado desde los métodos de colocación de piedra utilizados para construir las grandes pirámides de Egipto, el arte de crear estructuras magníficas a partir de la tierra permanece. A lo largo de los siglos, la mampostería se ha considerado un oficio noble, ya que los albañiles son responsables de algunas de las estructuras más impresionantes jamás construidas.
Albañilería antigua
A los romanos se les atribuye el mérito de hacer de la artesanía lo que es hoy. Desde el coliseo hasta sus basílicas y acueductos, fueron verdaderamente innovadores. Aunque la mayoría de nosotros pensamos más comúnmente en las pirámides y la arquitectura griega antigua, la mampostería se estaba utilizando en todo el mundo. Los constructores de la Gran Muralla China en Asia y los Templos Mayas de América del Sur también usaron barro, piedra y ladrillos para crear estructuras que todavía están en pie miles de años después. El uso de ladrillos hechos a mano también permitió a las personas que vivían en áreas sin rocas construir sin importar materiales a largas distancias.
Evolución de un arte
Convertirse en albañil requiere años de experiencia práctica y capacitación por parte de un oficial o maestro albañil. La artesanía es cada vez más rara debido a los avances en tecnología y materiales. Donde antes teníamos que moldear a mano cada ladrillo y dejar que el sol los secara, ahora tenemos fábricas totalmente automatizadas que producen ladrillos de cualquier forma o color simplemente volcando los materiales en un extremo. La forma en que construimos edificios también ha cambiado drásticamente. En lugar de colocar piedras o ladrillos uno por uno a mano, ahora utilizamos hormigón armado de acero preformado. Esto nos ha permitido construir edificios más altos y masivos, de forma más rápida y rentable.
Albañilería moderna
Todavía existe una demanda de albañiles, particularmente en el campo de la restauración. En un proceso conocido como alisado, un artesano quita la lechada vieja entre ladrillos o piedra y aplica lechada nueva en su lugar. Esto puede extender la vida útil de un edificio por muchos años, así como también preservar su diseño original. También hay una gran demanda en ciertas áreas del país en la construcción de viviendas. No existe un sustituto automático para el trabajo de un albañil, y todavía se hace de la forma en que se ha hecho durante milenios.
La mampostería se ha mantenido como un método de construcción extremadamente popular a pesar del aumento de la madera y el acero. Hay una belleza en el ladrillo y la piedra que no puede ser duplicada por ningún otro material. Realmente es una forma de arte que se ha desarrollado desde que el hombre comenzó a vivir en ciudades permanentes. La civilización humana está representada por las cosas que hemos construido, y la mampostería ha sobrevivido a todos los demás materiales de construcción por miles de años. La artesanía se está volviendo más especializada, pero es probable que dure muchos años más.